viernes, 9 de enero de 2009

Mira al frente


No seas esquivo, no me mires de reojo, no pases rápido ante mi objetivo, no quisiera ver por enésima vez esa ráfaga azul celeste difuminándose más allá de mi campo de visión. Pero la naturaleza es sabia, y tú más.

Maldita la hora en la que aquel anciano, meciéndose a la sombra de la morera y con una ramita de agrillo en la boca, pronunció estas palabras, pensando en ti: (no mires de soslayo pues) la curiosidad mató al gato.
P.D.: Una imagen vale más que mil palabras

1 comentario:

  1. Sin la curiosidad no existirían la mitad de las cosas de este mundo. Empezando por el conocimiento xD

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