martes, 27 de diciembre de 2011

Café solo, agitado, no removido

Le sobrevino una ira inmensa cuando vio cómo aquel vagabundo se calentaba el gaznate con un café de su máquina en su propio despacho y se quitaba el helor de los huesos con una manta, la manta mugrienta de su sofá. Pero en seguida ese sentimiento desapareció para convertirse en desesperación, cuando sus tripas le recordaron que no había tomado nada para desayunar.

"Sí, ha sido mi estómago", habría gritado si alguno de sus empleados hubiese levantado la vista de sus papeles, pero parecía que nadie se había dado cuenta de su presencia. Y nunca se habrían dado cuenta si no hubiese comenzado a buscar, mesa por mesa, un poco de café entre todo aquel mar de plástico blanco, como lo haría un zahorí en busca de un pozo con algo más que posos. El comisario cogió la primera taza, pero estaba vacía; después, agarró con todas las esperanzas que podía reunir a esas horas de la mañana uno de esos vasos de plástico, pero estaba lleno de colillas; y cuando iba a por la tercera, su imaginaria ramita de avellano se topó con un alegórico muro: la cabeza del más fiel y cercano de sus ayudantes apareció, chorreando sudor como el resto de su cuerpo, por el hueco de las escaleras.

Dejó caer la rama en forma de Y, guardó el péndulo en el bolsillo de la chaqueta y esperó a que Garedoi llegase a su altura. Su lazarillo traía consigo una mirada que no permitía presagiar nada bueno.


P.D.: Foto extraída del perfil de Tuenti del Agente Especial Dale Cooper (a.k.a. mejor personaje de la historia de la tv)

miércoles, 16 de noviembre de 2011

La parálisis de la luna muerta



Todos los poemas mentían.
Ella no era la llave del sur.
Borró la cerradura con el último trago que se debía.
No creas que me sentaba tan mal que hubieras sido tú.

En el salón la luna se quedó muy quieta
Hasta dejar de mirarnos y desplomarse muerta.

Bonito oficio era en nuestra cara el de la nieve de verano
Ahora que el infierno lo habían cerrado
Y Satán se tuvo que desalar y venir a vivir al piso como Erasmus

Diría que me acordaba de una canción celta subiendo en el ascensor
Diría de ser luciérnagas de brillar quemadas
Sacando a volar al edificio atado de un cordón

-Dimas- También conocido como "GO!DIMAS"

A propósito de...
Érase una fiesta lejos del hogar con chicos lejos de su hogar y con una chica lejos de sí. Bueno, mis queridos mendigos lectores ya era hora de que subiera algo, he estado de viaje y quizá siga todavía en él. No siento la tardanza

martes, 15 de noviembre de 2011

Guía de un célebre autoestopista


Un dedo pulgar hacia arriba, e inmediatamente un fogonazo de luz y una bocina. Un camión ronroneaba en frente suyo, esperándole.

Fue recibido por un gruñido de interrogación de un escuálido hombre, a lo que contestó con un gesto de fingida indiferencia. El escritor subió y se sentó con dificultades, intentando no tocar la caja rebosante de palomitas que ocupaba el lugar que deberían ocupar sus pies. Pronto se dio cuenta de que la cabina del camión tenía un olor particular, como a salitre y moho. Todo allí estaba húmedo. Lo estaba la manta de manchas de dálmata que cubría el asiento del copiloto; lo estaba la palanca de cambios por las grasientas manos del conductor; lo estaba el calendario erótico que pendía detrás de los asientos; lo estaban las axilas del auriga, mal resguardadas en una camiseta sin mangas.

El camionero aceleró bruscamente y el otro, con los pies sobre el asiento, besándose las rodillas y con el maletín pegado al pecho como una carpeta de adolescente, se echó hacia atrás por la inercia. Pero las fuerzas le fallaron y cayó sobre el costado izquierdo del camionero, sobre el tatuaje de caracteres cirílicos, tirando la bolsa de su regazo. Fue entonces cuando pensó que iba a morir... hoy por tercera vez.

Un ovillo de lana, o un gatito asustado y asustadizo que corre a protegerse a la barriga de su madre ante la presencia de un gatito algo mayor y desconocido. Ése era ahora el insigne escritor autoestopista. Paralizado por el miedo a la reacción que pudiera activarse en el cerebro o, aún más peligroso, en el fibroso brazo del conductor, no pudo más que entornar los ojos, preparado para recibir la estocada de gracia.

Pero no pasó nada.

martes, 1 de noviembre de 2011

Frutas del bosque nevado (II)


KO.
Un bosque, sin duda alguna encantador. Me desperté en un bosque encantador y nevado, blanco. Aún así preferiría que no fuese un bosque.
Acostado aún en el suelo, intentando recordar cómo había llegado a esa situación, vi unos cuervos cruzar mi campo de visión y perderse, a lo lejos, en el más blanco de los cielos. Esto me hizo recordar lo que me había desvelado del letargo impuesto por el puño de Françoise, la camarera: un zumbido, como de batir de alas, que venía desde alguna de las frondosidades que me rodeaban, pero rápidamente el batir de alas había sido sustituido por un canto estridente que también se desvaneció. Seguramente habrían sido los mismos pájaros que unos segundos después había visto perderse, recortando sus siluetas negras, en ese cielo a punto de estallar.
Pero rememorar por un segundo mi idilio con Françoise, la púgil, hizo que mi mandíbula y mi pómulo izquierdos volvieran a retorcerse de dolor. Fue entonces cuando, al tocar las deformidades de mi cara, me despegué del suelo y me puse en pie, muerto de miedo por no saber donde estaba ni lo que había pasado la noche anterior, y muerto de dolor por mi cara desnaturalizada y mi espalda ahora sin piel y en carne viva.
Y, por si fuera poco, a todo esto se le sumó el dolor (físico y mental) de cabeza que me sobrevino al resbalar con una especie de cuadernillo que pululaba por allí cuyo título, vi después de incorporarme, rezaba algo así como “Moleskine de un nuevo Mesías: vida, pasión y muerte de Samuel Mavic”.
No necesito presentarme porque, según esto, ya estoy muerto.

P.D.: A aquellos miembros que estudian en el exilio: no me creo que no estéis escribiendo. He dicho.

viernes, 30 de septiembre de 2011

Frutas del bosque nevado


Aquí, en la ciudad más lluviosa de Inglaterra, los pisos no tienen balcones bajo los que guarecerse cuando caen chuzos sin punta.
Aquí, en la ciudad más soleada de Inglaterra, la quinta pinta de cerveza siempre es gratis.
Aquí, en la ciudad más maravillosa de Inglaterra, todas las camareras se llaman Françoise, pero ninguna es francesa.
Aquí, en la ciudad más asquerosa de Inglaterra, las mujeres odian dos cosas por encima de todas las demás: la palabra futilidad y que les llames Frambuesa sea cual sea tu intención y sea cual sea el ángulo de arqueamiento de tus cejas.
Aquí, en la ciudad más puritanamente pecaminosa de Inglaterra, empezó y terminó mi fugaz historia con Françoise la camarera, la única que le gustaba que le llamase Frambuesa, cuando mi sexta pinta fue a parar a su escote crepuscular.

lunes, 19 de septiembre de 2011

Fragmento correspondiente a la estrofa nº 4 de un poema aún sin nombre


Los extraterrestres del espacio interior me acosaban
Y yo rezaba por no perder la cabeza entre sus hachas.
Y me arrodillaba pidiendo que solo mis demonios de confianza
Se fueran con sus miradas.
Y nada más, que me gusta bien quieta y enhiesta el alma.
Que no quiero caerme más a los tulipanes, Madre
Que en ese pequeño salto de altura
Las rodillas se me untan
Y no hay forma de que el verde salte.
¡Por favor! Que no quiero rendirme enamorado a más bellas hadas
Que ya ha hecho por mí bastante ese airecillo que mueven con sus alas

-Dimas- También conocido como "VamosaverDimas"

A propósito de... Mis queridos lectores indigentes espero no durmáis construyendo el resto de mis poemas inacabados, os aseguro que a mi tampoco me dejan dormir

domingo, 4 de septiembre de 2011

Fragmento de "Una hora de paz para los malvados"


Cuando den y cuarto decidiré sólo acompañar a los camiones hasta la mitad del camino.
No tengo porqué dejar abierta más la puerta del zulo.
La pintura se cae, los tiestos sirven
y el devenir de cualquier silbido atraerá a nuevos búhos.
No quiero descubrirles la contraseña a más extraños a la vuelta del petril
Donde todos aparcamos el coche por miedo a los vientos que mueven las sombras gigantes.

Los novatos paran la noche bebiendo cerca de la luna india
Y sólo es esa la razón por la que dejé apartada mi porción de pizza
Y un momento la definición de Nembutal.
Derramé un xilófono y en su charco,
Cuando se descompuso el sol, fermentó eufonía
Y en un yerro las torres de miente y palíndromos descritos por Irene.
Me acerqué abriendo la ventana al poniente
Y sosteniendo la contera del paraguas con los dientes.

-Dimas- También conocido como "Loterín,Loteriti,Minilote"

A propósito de...
Queridos lectores indigentes a este poema lo envuelve un secreto maligno por lo que no podreis saber más de él, a menos que vengais me toqueis al timbre y bajo una tenue luz os explique que misterios ocultan estos enigmaticos versos

martes, 23 de agosto de 2011

Sniff


Ese olor a coño se ríe de mí,
De las fronteras que sumido en una caída libre le he ganado a la memoria
De los kilómetros lejanos que por ajados e inverosímiles
Aparta cuidadosamente a un lado,
De los escondites que llevan en silencio las fotos de puentes y la palabra “álamo”,
En la brisa de sombras deja la luna oculta su rastro.
Y del único lugar seguro que he conocido y merecido con los años,
Los ojos cerrados.

Si orada las paredes haciendo llorar a la cal
Remueve el tuétano de los bisillos con ciclos de arrezú temprano
Pone hambrientos a los perros del barrio
Y humilla a la puerta tocando dos veces para no avisar.

Y no uso la entrada al almacén de las rosas que vuelan plantadas en el carril
Y no intento de ninguna de las maneras huir.
Ese olor me agrada, me atesora él a mí
Y no viene para siempre
Ni lo puedo encarcelar en mi nariz

Me lleva al ajenjo y a las nubes cabañuelas
A desprender unas mallas de algodón gris en el pasado .
Esas piernas se inundaban en la orilla
Y eran lenguas de treinta pies que se escondían en la piel

La cabeza aún apoyada
En sus sueños de calor.
La razón de porque no se bordan ángeles en las bragas.

Llévame al lugar de donde partimos, Oh! Olor rizado
Despertar al este del perineo con el corazón en casa y los ojos vendados

-Dimas- También conocido como "Laniñadetusojos"

lunes, 25 de julio de 2011

9-6-71-9-592-136-6



“Deberíamos habernos conocido en los puertos de invierno
Cuando el álabe de cristal aún es nuevo”
Ya les iba diciendo a tres hijas del Sian
Eso mismo este plácido verano en el lagar.

La rumana del remake
Había encendido sus cartas
En Inland Empire,
Sabiendo que la narración
De la instalación eléctrica
Comprendía en el hálito del espejo
Que los dulces finales no se hacen viejos
Que se echan de menos
Y que matan a los conejos.

Son idiomas lejanos a la palabra.

Ver la música girando como una adolescente enamorada
Que coge del tallo y besa
A cada luz refugiada en el boulevard.
Oigo los colores.
Se mezclan en acuarelas que he querido romper.
Fantasmas vagando en los ojos que se han querido y he ido perder.

La concha de la explanada
Es sólo una de sus alas.
Había leones de mar en las playas del atardecer.

-Dimas- También conocido como "Muuuuuuu!!!"


A propósito de...
Unas veces se escriben cosas sencillas que no entiendo y otras complejas que me son fáciles de entender

domingo, 24 de julio de 2011

El primero en despertarse


Que el cielo parezca frágil ante mis ojos
Cuando amanece,
Como un dulce niño despertando,
Como un amigo entrando en un abrazo,
Es una cosa entre él y yo.
No tiene porque saberlo nadie más.

-Dimas- También conocido como Dimasesunapodono?


A propósito de… Todo el mundo sabe que el amanecer es algo bonito
Entra dentro de la cultura popular romántica, sin embargo yo me di cuenta verdaderamente de ello no hace mucho, cuando tope con una artista con insomnio que sostenía que el amanecer era emocionante y fácil de rebobinar. Y éste ayer mismo me sorprendió por mi ventana

viernes, 22 de julio de 2011

Freddy


Ayer me acordé de ti.
Son moros y cristianos en Orihuela
y salí junto a mis amigos con una comparsa vestidos del "Día del Orgullo Gay"
yo odiaba mi traje, como es normal.
Dos chicos intentaron ligar conmigo y era horrible.
Salvo al final,
cuando dj de la carroza pinchó "I want to break free"
y vi a medio millar de personas imitando al gran Freddy
y por fin
me sentí orgulloso de ir con tirantes y sin camiseta,
entonces me puse a imitarlo yo también.

-Dimas- También conocido como "15minutosconmihermanayconpurpurina"

A propósito de... Aún recuerdo el día en el que mi cuñado me puso el live in Wembley y Freddy dijo: Are you ready?

martes, 12 de julio de 2011

Ida y Regreso: Zonas 2,3 y 4


Pueden hacer unos treinta grados.
Aunque si te despistas,
El ajetreo de la gente en la pasarela
Puede hacer parecer que está lloviendo.
Incluso podrías ver las gotas inundando tus pestañas a través de otros ojos
En un segundo donde el rumor se condensa
Y caen unas lágrimas vinculándote al azul
Y a la suspensión.

Ayer a las cinco, mientras los naranjos corrían a mi lado
Me picaron el billete hacia Elche
Con un troquel de trébol de la suerte
Y no sé, pero ese día me invitaron a un helado,
¡De dos sabores!
Ascendí despacio las noches de la catedral acompañado
Y las luces de las farolas soplaron en la oreja a mi favor.

Pude apretar sus rodillas desnudas entre las mías
Y parlotear sagrado
El verde brillante de los árboles donde se querían en un corazón
Fulanita y cualquiera
Se estaba drogando.

Y puede que en ese momento,
En otra parte del mundo,
Las cotorras se congelaran súbitamente
Y empezaran a caer de sus palmeras y de los cables de alta tensión
Impidiendo la buena circulación del tráfico
O que no le funcionara a alguien el mando
O que se la cayera de la cuchara a una niña el último cereal del vaso
Pero a mi me daba igual
Justamente en ese momento
Iba de su mano.

-Dimas- También conocido como "Tesoro,porsuhermanacuandoeraniño"

A propósito de... Hay dos tipos de personas, las que entra a una heladería y se presenta ante los helados y pilla de los sabores típicos para su tarrina o cucurucho, y la que innova con sabores de colorines. No sé cual será mejor o peor, pero de ¿cual eres tú, mi querido lector indigente?

domingo, 19 de junio de 2011

Siete brazos y tres dientes



- ¿Dónde está? -preguntó al recién llegado, mirándole furiosamente. Los demás, al ver la que se avecinaba, aprovecharon para irse.
- Yo no he sido. No me mires así -dijo con un solo brazo en alto, demostrando que no escondía nada.
- ¿Que dónde está? Enséñame lo que tienes ahí detrás.
- ¡Que no me mires así! ¡Que yo no he sido! -volvió a levantar la misma mano, la otra seguía pegada a la espalda.
- ¿Por qué tendría que creerte...
- ¿Por qué no? -atacó, interrumpiéndole.
- … si de todas formas eres el Diablo?
- Sí, pero ¿es que no has oído el refrán?
- ¿Cuál?
- “Se agarra antes a un mentiroso que a un cojo” -dijo ceremoniosamente, marcando los ritmos de las palabras con la cabeza y con la mano que tenía libre.
- ¿Y?
- No quiero pensar que crees que esto lo uso para comer -agarró y levantó hacia el techo el tridente negro- o para pincharte -sonrió irónico, mientras volvía a dejar apoyado el tridente en la pared.
- Ya... claro. Ahora resulta que el Diablo es cojo.

lunes, 23 de mayo de 2011

Las olas han tomado una decisión


Y huelo a viento marero.
Las gaviotas vuelan en círculos lejos de este sitio.
Sólo hay una regla, traer alborotado el pelo.

Las olas han tomado una decisión.
Un pájaro de horma mirando su rugido al filo de las rocas
Es la distancia que cubren mis sueños y la que hay entre tú y yo.

La espuma ha volcado toda su sabiduría en pompas de jabón.
Podrás ver las estrellas que vimos,
Podrás sentirme soplándote en los tobillos,
Cuando apagues los ojos o suene la luna de agosto en tu habitación.

Flotando en tazas de café.
Comunicándose mediante cigarrillos.
No se atrasará la hora del pez.
No olvidaré prender a medianoche tu guiño.

Y bueno, huelo a viento marero.
Ha besado mi cara, ha sobrevolado mi pecho.
Ya lo noté en otros veranos,
Cuando cayó el invierno.
El destino y el tiempo me lo impiden
Pero iré en bicicleta a despedirte.
Dios mediante
Y si no acaba conmigo la noche más triste.

-Dimas- También conocido como "Labarbalargaenocasionespelirroja"

A propósito de...
Aún recuerdo la noche que fui el hombre más triste montado en bicicleta. Vaya plusmarca o récord

martes, 17 de mayo de 2011

Ooh! Encantamiento en la Avda. Juan Carlos


La última vez que te vi conducía bajo los efectos de tu encantamiento
Más de una milla no teniendo nada que ver con el sol de rejas que nos había abandonado
No volvíamos a la playa del moro en una autentica ola verde
No volvíamos a casa
Ni a la tierra que nos había sacado como nabos
Desatados, sabiendo que uno de estos últimos trucos sería el último momento sonreíamos por la Avenida Juan Carlos.

Dijimos unas cuantas cosas que teníamos que hacer antes de que no te quedaras
Y las galletas saltaron por las nubes
Dejé de ejercer como superhéroe
Porque es una vida demasiado complicada o por mi propio bien
Pero aún soy bello en matemáticas
Y en parte por mi parte guardo en secreto lo de aún amarte

Oh! pequeña Mariam las huellas vuelan como mariposas!
Como polvo atrapado en la luz!
El verano se acerca a nuestras capas y esto no habrá sido escrito
Guárdame en este momento,
ya ni siquiera recuerdas la tercera vez que fuimos al cine
apunto de caernos y por fin nos movemos alrededor del viento
cuanto tiempo te he querido, pequeña Mariam
y hasta aquí puedo leer.

-Dimas- También conocido como "Di+"

H.O.D


No he podido masturbarme con ella
Porque no la oigo bien en mi cabeza
Si me perdonan tengo la razón en otra parte
Flotando dispersa entre los tejados
O aprendiendo a ser del corazón de las tinieblas.

-Dimas- Tan bien conocido como "DimMode=Medialuz"

jueves, 5 de mayo de 2011

Espero que el resto de manzanas estén tan rica como ésta cuando las encuentre


Es más difícil de lo que parece adivinar formas en las nubes
Cuando no hay ni una para impedir que el sol caiga.
Yo voy bajando la cuesta con cuidado.
Cogí todas las manzanas que pude allí arriba,
Ahora las llevo en la bolsa que queda por delante al estirar la camiseta.

Silbo dulces melodías de pan
Y estoy desando hincarle el diente a una de mis manzanas
Pero si dejo un brazo libre rularan por la pendiente
E irán a donde quieran.

Tendría tiempo de recogerlas
Me chica me ha plantado
Y no hay nadie al final de la rampa
Tendría tiempo incluso para amaestrarlas
Para que vuelvan
De persuadirlas para que vean un digno futuro en mi boca.
Me da igual que se haga tarde
La estúpida noche vendrá a por mí
Puedo hacerme un sitio entre las espigas
Y contar las vueltas que dan las aspas de ese molino moderno
que alguien ha puesto ahí enfrente.

Espero que el resto de manzanas estén tan rica como ésta cuando las encuentre.

-Dimas- También conocido "LoterínoelchicodelacamisetaCalipo"

A propósito de...

La foto de ahí arriba es de mi mismo

sábado, 23 de abril de 2011

El Barrio de la noche a 90 km


Allí en los puertos de Mía
Por lo menos el fuego ardía de forma sincera
Y los barcos hundían su madera negra
En un mar capicúa y sin capitán.
Saludando a su bandera muerta, marineros,
No libres de pecado, pero si,
Libres de conciencia.

Las alegrías esperaban apoyando un talón en las puertas.
El rumor de tantas palabras subía las cuestas mejor que el humo
Y despertaba a las bombillas.
Bebían y una especie de limonero
Bajó su rama con más luz para tocar mi frente.
La policía no había llegado aún a la plaza,
Ni los idiotas a sus casas.
Era tiempo de escupir.

Una chica de tras de otra
Sus piernas largas podrían hacerte vomitar.
Yo esperaba una carta de una militante desconocida
Con la fecha dibujada en otro tiempo
Y con la letra de una escritora de posdatas
Que tenía los ojos más grandes que nunca iba a ver más.

No paseas por pasear
Y encuentras a Eva en la lonja y a Bea trasteando un contador de luz
Y también a la otra, otra que no recuerdo como se llama
Pero que me vendió la puerta de su cobertizo en la imaginación.
Las acompañas y les gritas, les sostienes las manos
Y les preguntas por la salida más rápida
Todo eso mientras una de ellas comprende que te está mirando durante mucho tiempo fijamente
Y de que la sala Estéreo se las tragara.

Annie Hall todavía está pendiente de título en español.
La gárgola rapada quizá sólo era nazi y no lesbiana.
Mi tabaco y mi foto colgaban de no aparecer por la mañana
Y yo aun tenía que conducir casi noventa kilómetros a casa.

-Dimas- También conocido por "Quénombremásraro!"


A propósito de...
Gran noche sin alcohol en las callejuelas repletas, de alguna parte de Alicante. Roberto, Villa y yo.

martes, 12 de abril de 2011

En ese preciso instante


¿Le debemos algo a la gente a la que le dijimos te quiero?
¿No?
Entonces ¿por qué esas ansias de volver?
Si siempre era lo mismo.
Un gran estribillo, ¡si señor!
Pero igual o repetido.
Entonces ¿por qué volvería a rendirme, a capitular en sus mismos brazos,
A saludar a sus mismas manos,
Olvidando el átomo extraño que trabajó para maniatarnos
A indagar en los mismos besos al amparo de los mismos labios?
¿Por qué no olvido de golpe su camino a casa,
Su forma de entonar carcajadas
O la anécdota de que sólo le salían bien las tortitas si estaba alegre o encantada?
¿Por qué no se me va como me llamaba
Como si hubieran echado agua
Y no oyera el eco paranoico de sus últimas palabras?

Amigos, sospecho que me han tendido una trampa,
Cualquiera o desde lo alto,
En la que enamorarme al verla por primera vez,
Que me llame para oírla dormir a medianoche
Encontrarme con sus golosinas preferidas al ojear en un quiosco unas revistas
O decirle adiós disimulando no perder el habla o la vida,
Tienen mucho que ver,
Y es toda una maravillosa sucesión de elaborados trucos, miradas rápidas, ladronzuelos o artimañas
Que se repiten una y otra vez
Mientras desayuno y me miento
Mientras conduzco y me miento
Mientras sueño y sigo despierto y me sigo mintiendo.
Enemigos, eso suele pasar por decir te quiero justo a tiempo.
En la impecable circunstancia en la que tenia sentido decir
En el mago momento, en un tris, en un trance
Y en lo que algunos sabios escépticos del amor o tipos duros sin futuro ni corazón
Siguen empeñados en llamar “ese preciso instante”

-Dimas- También conocido como "Desconocido"

A PROPÓSITO DE..."Nadie, ni siquiera la lluvia, tiene manos tan pequeñas"
by E. E. Cummings

domingo, 27 de marzo de 2011

Mirando al sur


Los dos permanecieron callados durante poco tiempo. La mujer se sentó en la banqueta, pegada a la mesita de noche, dispuesta a obedecer cualquiera de los mandamientos del moribundo. No se atrevió a coger el libro de encima de su mesita, que había dejado a la mitad desde que la situación de él empeoró; se lo tenía prohibido. Así que no leía, solo miraba fijamente esos ojos negros de hiena, que oscurecían a marchas forzadas toda la estancia.
Al rato, los párpados encerraron tras de sí la fuente de la oscuridad. Sigilosamente se levantó de la banqueta y se dirigió a su lado de la cama. Cogió el libro, fue hacia la ventana y, a través de una pequeña rendija por la que entraba una tímida luz, comenzó a leer. Pero poco duró esa evasión.

- ¿Qué haces ahora, Ángela? - la hiena es un animal carroñero, nocturno por antonomasia, que huele cualquier presa que se moviese aun en tinieblas.
- Nada. Miro cómo cambia la luz. Ha dejado de llover, el sol brilla en todo su esplendor. Hace un día estupendo, ¿no crees? - dijo apretando la cortina hasta que sus manos comenzaron a sangrar de rabia.

jueves, 10 de marzo de 2011

¿Qué pasa al final del Re bemol?


A partir de ahora el tiempo es perecedero
Y el inmortal corazón podrá dejarse morir
Entre hojas o a través del lluvia por fin
Al ver acercarse su entierro.

Ya puedes empezar a llorar, cielo
A partir de ahora sólo podrás besar en el infierno.
Dile al polvo que no sea tímido, que se acerque.
Dile al alma que no caben más quejas, que se cierre.
No volverás a sentir.
Si el amor sólo en lágrimas se pierde.

-Dimas- También conocido como “Midas”

miércoles, 23 de febrero de 2011

Soy en absoluto


Son todos unas putas.
Mis soldados de plástico,
Mis uniformemente coloreados cowboys,
Y mis héroes aun desprovistos de extremidades, pilas o accesorios
Tenían más alma al borde del saliente
Que la que imaginan taponar ellos cuando cierran la bocaza.
Ahora.
Frente a mí.
Mirándome a los ojos.

Aun así hay que dar gracias a cada madero cruzado
Porque el molesto sonido que hacen con sus zapatos al pararse a hablar conmigo
Y su dinero perfectamente plegado en sus carteras
Nos recuerda que tenemos alguna cosa dentro
Y que hace sonar nuestras paredes
Agitándose como cuando sólo queda una única moneda en la alcancía.
¿Una llave amiga de un cordel para la puerta menos usual, quizá?
Una nota firmada de Mr. Bergstrom
Unas pelusas oxidadas formando casi como una sortija.

Los perros nos ladran al otro lado de la verja
Porque quizás tengamos alma a éste.

A veces, como tú lo eres,
Yo también soy tan tocable.

No veo nada volando dentro de ellos.
Ni la más mínima cuenta de aire cuando están.
Como la cafetera sin un viaje de humo que suba hasta su interior.

Deben.
Aun así que salgan primero los que arden antes.
Tiren este poema al suelo.
Pulsen aquí para la luz.

Ni si quiera se reflejan en el suelo al levantarse de la taza
Aunque su propósito del día sea intentarlo.
Los acaban de encerar con cepillo y puesto debajo del grifo.
Sus cinturones no tienen agujeros
Y su mierda no huele.
Cuando no puedes llamar en una conversación de quince minutos
A algo, sonreír, huye.
Provocan una tierra negra
Y un precipicio en las sombras
Que tú y no ellos, arrojan.
La gente deja de fabricarse y es multitud
Y ni los pájaros dibujados
Quieren saber algo de ellos.
Sus abultados escotes han creado una ilusión de leche tibia para los de Copperfield y Twist.
Formulan hostales con palabras robadas a la verdad.
Rubias tapadas por que les ha tocado enero en el catálogo,
Chucks sin una nipona que salvar.
Hacen creer a los niños que el destartalado submundo de pañuelos estropeados por la lavadora en mis vaqueros no es suyo en absoluto, que no les pertenece como a las rosas el sol de mediodía que bordea color azafrán los trasteros y las medianas.
¡Qué hijos de puta!

Ellos y ellas creen en si mismos.
Yo no estaría tan seguro.
Es algo personal.

-Dimas- También conocido "Aquelquetraficaconapuntesycapuchasdeboli"

lunes, 31 de enero de 2011

El collage de Golightly


Se reunieron y se vieron por fin bajo la lluvia del cine.
Gabardina empapada hasta el suelo
Y tobillos helados sin el poder de dar un solo paso:

-Dame un poco más de tiempo, Holly

-¿y si muero de repente?, el tiempo no es nada seguro

-"Los amores que matan nunca mueren"
O eso dijo rodando el vinilo hasta que se volvió loco en la gramola
¿Has oído lo que he dicho, Holly? no puedes morir

-Mi amor nunca ha matado a nadie,
Ergo soy tal para cual
O simplemente mortal

-Hay lápidas pudriéndose de solas
En los caminos del cementerio
Y podridas hablan de otra cosa:

"Muerto y enterrado por la misma mujer
-Corazón anónimo-"

-Esos epitafios hablan de Golightly cuando les acercas un candil
Y no de mí.

-Las tumbas están abiertas, antes o después
Los muertos se atreverán a volver allí.

Se reunieron y se vieron por fin.
Bajo la luz de la película.
Donde la lluvia le tomó el pulso al cuerpo
Y el cine dio por muerto
A uno de los dos.

-Dimas- También conocido por “Hannibalunaveznieratanlistoniteniacanas”

A propósito de… Hay poemas a veces no escritos que se forman al rededor de mi. Éste, fue capturado y enjaulado por dos poetas. Ahora vuela libre.

sábado, 22 de enero de 2011

Una breve historia a través del tiempo, el amor y el sonido a calderilla.


Limpió sus gafas del olor a gónadas
Que le habían dado en esa mina sin rastros de candiles,
Y el médico le propinó un beso en las fontanelas.
“Voy a estar sólo conmigo mucho tiempo
Y ni siquiera dijo buena suerte,
Cuando mi madre me sacó en brazos
De los recién fregados pasillos de maternidad”
Las jirafas de sus muros parecían tomar vida para cabalgar por los azulejos
Y la cera de la que estaba hecho, madurar.

Lo vi en una foto vieja.
El padre una vez tuvo una barba aviesa y era barbero de navaja seca
y de huertos y de una perra llamada Kimba y de jornales justo y de trenzas.
Se ganó la vida como bastardo aprendiendo de jefazos de la capital
Para luego montar aquí un negocio de autobuses y celebrarlo incólume en el bar.
De joven había empezado a contar espigas en vestidos
y dormido bajo las sombras de un carro que le rayaban la camisa.
Yo sólo lo vi una vez entre todos mis sueños de aquella época
Parte de él se lo llevaban los enfermeros robándolo de su silla de siempre
Y la otra es por la que aun cojo higos y los dejo en su abandonada puerta
Por si algún día vuelve
Y se cobra.

En el cartel de los troleros puesto en la plaza pone con arrope
Que sólo me miente para decirme la verdad
Y que el suelo de la cocina era de tierra y se barría con tierra
Que no había sillas suficientes pero si un corral de gallinas locas,
Cerdos cosidos, conejos altivos y ollas de barro con cocido
Y una vieja, que cocinaba día y noche entre montañas de harina
Y filosofía de tienda.
Allí se ponían rojas las mejillas de mi madre
Cuando llegaba el tiempo de recolectar las manzanas
Allí cosió su minifalda azul.

En fin, el James Dean del serrín conoce a la Heidi de los medicamentos
Justo al bajar de la pradera.
Y me tienen a mí y a dos más,
Entre libros que a mi entender siempre han sido antiguos
y mantas traviesas de la siesta del último viaje juntos.
Lejos de los sombreros de paja de San Antonio.
Donde abusan de tu solapa las flores sinceras
Y tus pies reconocen a primera vista su vocación de pez cuando los hundes en las charcas.

Pero ahora no hay tantos espejos en casa del cristalero
Y yo empeñé el chasquido de los mistos por el poco cuero de mis suelas
Y por el último regalo nuevo a mi prometida de las afueras.
Mamá tiene las manos vendadas
Y un cuervo ha secuestrado al espíritu de papá
Y lo ha escondido entre las ramas.
Miguelito hace viajes al hospital
Pero estará bien pronto, estoy seguro.

Vendrán tiempos mejores, y los limpiabotas y los de correos
Tocaran la campana lanzándoles monedas de a uno.
Y yo podré comprar la vaca con más manchas y más gorda de todo el verde norte
Y te la regalaré.
Para sentarnos a su sombra
Y engancharnos a sus tetas toda la tarde.
Hasta tener la barriga hinchada
Y la boca llena de un olor penetrante a nata.
Hasta que una gota resbale del cielo.
Se te empañe la mirada y el pecho de estrellas.
Te quite la camiseta.
Y la hierba se duerma por el peso de las espaldas.

-Dimas- Tambien conocido por su abuelo como “Sirigüelas”

A PROPÓSITO DE...Presten atención a toda historia que parezca un cuento
Depués de todo ¿Quién no quiso recorrer el tiempo?

martes, 11 de enero de 2011

Cuando el príncipe ya no tiene color preferido


Desteñidas de azul mis mallas:
Es más tiza mi Tizona,
Es más escoba que caballo,
Es menos mío su corazón atrapado allá en lo alto.
¡Ay de mí! Sin su príncipe,
Mi damisela se encuentra a salvo.

-Dimas- También conocido como elprincipedeotrocolor

martes, 4 de enero de 2011

La más fina de las líneas (el caso de A.C.)

Al cerrarse la puerta detrás de él, notó una pequeña ráfaga cálida rodeándole el cuerpo, invitándole a adentrarse un poco más. Se sentía muy cómodo en ese entorno, entre carmines y carmesíes danzando a ritmo de jazz y rodeado de poemas colgados en las paredes esperando a ser leídos en la tarima de la esquina. El bienestar iba en aumento a medida que inspiraba la embriagadora esencia con la que el café acicalaba el aire del local.
Había tres clientes. En una mesita redonda, al pie mismo de la tarima, una pareja hablaba entre susurros, inclinados hacia delante y calentándose las manos con dos grandes tazas humeantes. Una persona más completaba el cuadro, solitaria, sentada al final de la barra, a la luz de una cerveza fría que amarraba como si temiera perder alguna última oportunidad. La pareja no notó la presencia del nuevo cliente, pero el hombre de la barra se sobresaltó al verle, o eso le pareció a A.C., pues no dejaba de levantar los hombros y mover la nariz, como oliendo algo chamuscado.
A.C. dudó un poco, pero finalmente resolvió dirigirse a aquel tipo, cuyos tics aumentaron no en cadencia, sí en intensidad. No obstante ya eran las seis y a alguien se tenía que dirigir.